¨Recuerdo haberme sentado ante un comité de líderes de misión y haber luchado por responder a esta pregunta. Me parece que hay muchas preguntas detrás de esa pregunta. Respondí, como lo hago a menudo, con una historia. Les conté sobre la obra de Dios en mi vida y mis experiencias en la vida y el ministerio que me habían llevado a este punto. Y recuerdo sus expresiones de preocupación. Al final, deben haber concluido que fui llamado, ya que me lanzaron al campo misionero hace más de 25 años.

Todavía lucho con la palabra «llamado», pero no con la realidad del mismo.¨  Leer Más >>